“Un cristiano es libre, dueño y señor de todas las cosas y no está sometido a nadie. Un cristiano es un esclavo sujeto a prestación personal en todas las cosas y está sometido a todos” Martín Lutero. 1520

jueves, 30 de abril de 2009

Declaración de Alcorcón.

Gracias a una revista digital cristiana que criticaba una tal Declaración de Alcorcón tuve la curiosidad de averiguar en qué consistía dicha declaración.
Di con ella con facilidad y pude saber que se trata de un documento firmado conjuntamente por dieciocho líderes de iglesias reformadas.
Tras su lectura he llegado al convencimiento de que estaba totalmente de acuerdo con su contenido, asi que he firmado mi adhesión.
Copio a continuación su contenido así como el enlace para firmarlo para que cada cual pueda leerlo y firmarlo si lo cree conveniente.
Reunidos en Alcorcón, Madrid, los días 22 y 23 de septiembre de 2007, con el objeto de analizar la situación ética que atraviesa nuestro país y discernir cuál es nuestro deber como cristianos evangélicos y testigos de Jesucristo, y reconociendo que nuestro testimonio sobre estas cuestiones no ha sido lo suficientemente claro hasta la fecha, los abajo firmantes hacemos la siguiente declaración:
Que la situación moral en que nos encontramos es sumamente grave, con la institucionalización y legalización de prácticas aborrecibles para Dios tales como el aborto[1], la experimentación con embriones humanos[2], los atentados contra la familia[3], el matrimonio homosexual[4] (y el derecho de adoptar niños que lleva aparejado), la identidad de género[5] o el falseamiento del sentido de la justicia en asuntos como el terrorismo y otros semejantes por motivos políticos[6]. Todas ellas son prácticas condenadas expresamente por Dios en su Palabra (la Biblia).
Que la responsabilidad de los cristianos en esta hora es identificarse con lo que Dios revela, enseña y manda en su Palabra, dando así un claro testimonio de la Verdad, sin por ello adoptar una actitud de juicio hacia aquellos que, engañados por el diablo, han caído en prácticas contrarias a la voluntad revelada de Dios o las promueven, a los cuales llamamos a recibir la gracia y el perdón de Dios en Jesucristo mediante el arrepentimiento y la fe.
Que nuestro deber como parte de la Iglesia de Cristo es instar a nuestras autoridades a que recapaciten y dejen de subvertir los valores y los principios dados por Dios en su Palabra, lo cual no puede sino acarrear mal para la sociedad española y ponerlos a ellos mismos bajo el juicio divino[7].
Que nuestro deber como cristianos en un país democrático es utilizar todos los medios legítimos de que disponemos para la defensa de los beneficiosos valores que enseña la Biblia, uniendo fuerzas, si se tercia, con aquellos que busquen los mismos objetivos que nosotros, y resistiendo a quienes quisieran borrar toda huella de cristianismo de nuestra sociedad y dejarla enteramente en tinieblas y a merced del enemigo de Dios y del hombre.
Alcorcón, 23 de septiembre de 2007
FIRMAN:Juan Barnreuther; David Burt; Wenceslao Calvo; Demetrio Cánovas; Iñaki Colera; Bernard Coster; David Estrada; Francisco González; Diego Guirao; J. A. Juliá; Curt Kenneth-Borrough; Boni Lozano; Frances M. Luttikhuizen; Scot Musser; Juan Sánchez Araujo; Larry Thornburg; César Vidal.

lunes, 20 de abril de 2009

Milagros.

Me llama la atención encontrar en La Atalaya, la principal publicación de los testigos de Jehová, de 15 de febrero de 2.007, y concretamente en la página 11, considerar como un favor de Dios que un día dos testigos de Jehová estaban indecisas acerca de formar parte de una cola para recibir ayuda alimenticia del gobierno o dedicar ese tiempo mejor a predicar por las calles.
Tras meditarlo optaron por lo segundo. Finalmente ese día no llegó la ayuda gubernamental y todos los que estuvieron en la fila se quedarón con hambre y ellas pudieron predicar. No explica porque no predicaron a quienen estaban en la cola y así podían matar dos pájaros de un tiro. La revista entiende aquello como un milagro y no se detiene en notar cómo el pecado (ambición, ira, etc.) ha provocado esa situación de hambre, inseguridad y terror.
Pero poco después me encuentro en mi periódico habitual que en una iglesia derruida por el reciente terremoto de Italia, los bomberos han podido rescatar intacta una escultura de marmol de la virgen María. También aquello es calificado de milagro, obviando que la feligresía de la iglesia ha sido diezmada, que el templo ha quedado inservible y que seguramente esos bomberos harían más falta en otros lugares de aquella zona devastada.
Realmente el milagro es que el Señor no se harte de una vez por todas y siga teniendo paciencia con todos nosotros.

sábado, 11 de abril de 2009

Ángeles.

Anda de moda entre los amantes de lo esotérico el estudio de los ángeles. Lo que sucede es que, como de costumbre, andan más que desencaminados.
Ven los ángeles como intermediadores, como conseguidores de favores, y al final como sustitutos de Dios.
Pero si observamos la Biblia, encontramos que de los millones de ángeles existentes sólo conocemos el nombre de dos, Miguel y Gabriel.
Vemos que rehusan recibir cualquier tipo de adoración (Lucas 1:26; Apo. 12:7) y hasta no hacen alarde de su mayor sabiduría y poder (1ª Pedro 1:12)
Nuestras miradas si deben dirigirse a ellos, pero no para enviarles oraciones, peticiones y mucho menos adoración. Simplemente debemos aprender de su capacidad de obediencia, del fin hacia el que se dirige su actividad y su gran humildad.
Cabe preguntarse si todos aquellos entre quienes se han puesto de moda los ángeles y todo lo relacionado con ellos, no estarán más interesados en realidad en los ángeles que cayeron.